¿Conoces acerca la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos?
Hoy 29 de septiembre se recuerda el Día Internacional de Conciencia de la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos. Esta fecha conmemorativa fue designada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el pasado año 2019. Esta iniciativa trata de contribuir a la lucha contra el Hambre y el Cambio Climático.
Los conceptos pérdida y desperdicio, a pesar de su similitud, implican dos cosas distintas.
Un alimento desperdiciado es aquel que tuvo que desecharse y no fue consumido o utilizado de forma alternativa (no alimentaria). Esto sucede por elección -como al botarlo a la basura porque no gustó- o porque se dejó que se estropeara o caducara por negligencia.
En cambio, la pérdida tiene que ver con la disminución de los alimentos para el consumo humano en las fases de producción, post-cosecha, almacenamiento y transporte.
De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), a nivel mundial, aproximadamente 1300 millones de toneladas de alimentos cada año se pierden o se desperdician. Esa cantidad bastaría para alimentar a 2000 millones de personas.
El 6% de estos alimentos desechados son de Latinoamérica y el Caribe. Asimismo, cada año la región pierde y/o desperdicia alrededor del 15% de sus alimentos disponibles.
Quizá puede parecer poco para algunos, pero sólo con los alimentos que se pierden a nivel comercial, es decir, en supermercados, ferias libres, almacenes y otros puestos de venta, se podría alimentar a más de 30 millones de personas.
Cadena de suministros
Los alimentos se desperdician a lo largo de toda la cadena de suministro de alimentos, desde la producción agrícola inicial hasta el consumo final en el hogar.
Por ejemplo, en los países de ingresos bajos, la mayoría de los alimentos se pierden en las etapas de la cadena de suministro de alimentos que van de la producción al procesamiento.
En cambio, en los países industrializados se pierden (tiran) alimentos cuando la producción excede la demanda.
En esos casos, los agricultores, con el fin de garantizar la entrega de las cantidades acordadas, hacen planes de producción y acaban produciendo cantidades superiores a las necesitadas.
Eso provoca que, cuando se produce de más, una parte de las cosechas excedentarias se venda a procesadores de alimentos o como comida para animales. Pero esto no es económicamente rentable y provoca un gasto de recursos. Esto puede prevenirse con comunicación y cooperación entre agricultores.
Impacto ambiental
Fuera del factor hambre, el desperdicio y la pérdida de alimentos tienen un impacto negativo en el medioambiente. La producción de alimentos utiliza agua, tierra, energía y otros recursos naturales. Si se producen alimentos y no se les saca provecho, pues junto a ellos, se desechan estos recursos.
¿Qué puedes hacer tú?
– Compra tus alimentos asegurándote de que se encuentran en buen estado. De esta forma sabrás que puedes guardarlos por un tiempo prudente.
– Almacénalos adecuadamente. Usa papel, frascos de vidrio o envases de plástico apropiados para cada alimento. Si compraste demasiadas verduras o frutas, lávalas y congélalas.
– Procura comprar en cantidades que puedas consumir. Trata de calcular la caducidad de cada alimento, para que cuando vayas al mercado sepas la cantidad que necesitas antes de volver.
– Trata de aprovechar tus alimentos al máximo. Por ejemplo, usa las cáscaras de frutas para jugos hervidos o come los tallos del brócoli. Existen varios trucos y consejos para sacar todo el provecho de lo que compras.
Desde el Patrimonio Alimentario se pueden recuperar saberes ancestrales que nos llevan a prácticas de cocina más eficientes en el uso de los productos. Sin duda, la pérdida y el desperdicio afectan la dura tarea de los pequeños agricultores.
Por Sonia Córdova Alvéstegui
COMUNICACIÓN MIGA BOLIVIA
Fuentes:
FAO (2015). Iniciativa mundial sobre la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos. Roma, Italia. Disponible en: http://www.fao.org/3/a-i4068s.pdf
Benítez, Raúl (2020). Pérdidas y desperdicios de alimentos en América Latina y el Caribe. FAO. Disponible en: http://www.fao.org/americas/noticias/ver/es/c/239393/