Es rica en proteínas y pobre en grasas. Su aporte de hierro es importante, particularmente en la alimentación de niños y madres. Cocinado, tiene un sabor parecido al de la carne de conejo.
Exótica y exquisita. Así se la puede definir a esta carne que posee el doble de Omega3 que el resto de las carnes. Tiene bajo contenido de colesterol y ayuda al cuidado de la salud cardiovascular.
Además de ser nutritiva, tiene altos niveles de fibra y es una rica fuente de proteínas. La carne de este camélido andino también se caracteriza por su bajo contenido en grasa.